Para llegar al orgasmo más fácilmente: la alineación coital
Alineación coital
Puede que la pregunta no esté en boca de todos, pero la respuesta merece más atención. Porque aquí está, la alineación coital fue imaginada con un objetivo preciso (y beneficioso): satisfacer a aquellos que tienen dificultades para correrse sólo a través de la penetración vaginal.
«Alineación coital». El término no es común y, sin embargo, es lo suficientemente concreto como para que podamos visualizar rápidamente de qué se trata: dos cuerpos alineados, en pleno coito. Nos hace pensar en una posición que ya conocemos muy bien pero que no tiene buena prensa (equivocada, todo sea dicho): el misionero. La persona que penetra está arriba, la persona penetrada está abajo. Y cada uno de ellos va de un lado a otro, más o menos con ganas.
Uno se pregunta: ¿cuál es la diferencia entre ambas, aparte de una formulación más descriptiva para la primera? Según el psicoterapeuta que lo originó, Edward Eichel, también investigador de la sexualidad, se trata de la fricción.
¿Cómo se hace?
La técnica de alineación coital (o CAT) fue creada por el experto específicamente para quienes tienen dificultades para alcanzar el orgasmo sólo con la penetración vaginal.
Así que, para compensar esta frustrante realidad, esta posición mágica utiliza una técnica propia: el balanceo. Y a la penetración, añade la estimulación del clítoris, enfatizando el movimiento vertical y la fricción en lugar de los empujes hacia dentro y hacia fuera.
En términos de organización, es lo mismo que el misionero. Excepto que nos quedamos pegados el uno al otro, y dejamos que la persona que penetra se deslice con fervor y ejerza presión sobre el clítoris de la otra (y el suyo si lo tiene, porque por qué no combinar el negocio con el placer) para aumentar las sensaciones diez veces. Este es el famoso balanceo. Y además, un plus importante: esta proximidad acentúa la intimidad.