Un camarero encontró un fallo en un cajero automático y pudo sacar dinero gratis
El dinero gratis no existe, ¿dices? En Australia lo hay. Hace nueve años, un camarero se paró frente a un cajero automático en medio de la noche. Por la noche, se hacía con el dinero para la siguiente ronda de bebidas. Descubrió un fallo en la máquina, se dio cuenta a la mañana siguiente de que tenía dinero gratis en sus manos y decidió repetir el truco.
De este modo, el empleado del bar Dan Saunders ganó más de un millón de dólares en cuatro meses. Organizó fiestas carísimas, pagó su matrícula y la de todo su grupo de amigos, y voló con ellos en un jet privado a una isla remota. En ningún sitio me sonaba.
La conciencia lleva a Saunders a la comisaría de policía, donde explica toda la situación, pero en el juicio nadie entiende cómo esta laguna técnica -algo sobre el mantenimiento rutinario de los cajeros automáticos que permite que las transacciones de Saunders se cuelen entre las 3 y las 5 de la madrugada- puede ser valorada legalmente. El veredicto: fraude, por el que sólo tiene que ir a la cárcel durante un año.



